Muchas personas tienen la intención de donar a distintas fundaciones, sin embargo, una cosa es querer hacerlo y otra es realizar la acción. No contar con efectivo en el momento de ser requerido el aporte, la dificultad para realizar la donación de forma inmediata o la incomodidad y apatía por parte de los posibles benefactores por la insistencia en el momento de ser pedidas, son los principales impedimentos para que la gente decida entregar estos aportes.

El auge de pagos mediante dispositivos móviles, ha hecho que estas nuevas tecnologías se usen también para facilitar las donaciones. Un ejemplo claro es SnapDonate, una aplicación del Reino Unido, creada por la Fundación SnapDonate y liderada por el ingeniero Mark Warrik – disponible para Android y iOS – hecha precisamente para agilizar y hacer más fácil este procedimiento.

Usando reconocimiento de imagen y una base de datos de más de 13.000 organizaciones vinculadas a la aplicación, basta con ubicar el celular frente al logo de alguna de estas fundaciones (sin importar donde se encuentre) para que el dispositivo lo reconozca y la persona pueda realizar un aporte superior a 2 libras esterlinas.

No hay problema si no se tiene acceso a Internet, ya que la aplicación funciona también de modo offline, basta con hacer el procedimiento regular y una vez se cuente con conexión la donación se hará efectiva

El pago se hace a través de JustGiving, una de las plataformas de recaudación de fondos más grandes del mundo y el principal apoyo de Snap.Donate. Además funcionando con los estándares de seguridad de esta empresa, los detalles financieros de la tarjeta de crédito o PayPal estarán protegidos, dando un aval de confianza a los usuarios donantes.

La aplicación puede ser usada en cualquier país, sin embargo, la beneficencia será destinada a la gestión de esa organización únicamente en el Reino Unido, hecho que limita su alcance y la posibilidad de que personas alrededor del mundo hagan donaciones escogiendo libremente a donde quieren destinar los recursos.

En un mundo donde las acciones filantrópicas están teniendo cada vez más acogida, es interesante ver como la adaptación de sistemas de pago, cuyo objetivo inicial era netamente comercial, está siendo aprovechada por fundaciones e instituciones con el fin de crear nuevas plataformas y aplicaciones que permiten a las personas colaborar con distintas causas de una forma más sencilla y rápida.

Imagen: static.guim.co.uk

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